LorenzoMediano.com > Obras literarias > Pirineos > Donde duermen las aguas
Sinópsis: Una joven maestra de la capital llega a Biescas de Obago, un tranquilo y apartado pueblo de los Pirineos. Pero pronto descubrirá que bajo la aparente quietud se esconde una oscura trama. Sin desearlo, se encontrará sumergida enuna lucha desesperada por salvar la naturaleza, por salvar su vida, por salvar su amor.
Historia: Lamento ser tan misterioso, pero de Donde duermen las aguas sólo puedo contar anécdotas sobre cómo se escribió, no lo esencial. ¿El motivo? Está bastante claro si se lee la novela; y lo resume la advertencia al principio del libro: �La trama de esta novela está basada en hechos reales, aunque se han cambiado algunas circunstancias para preservar la intimidad de los protagonistas y, sobre todo, para no poner sus vidas en peligro. Así pues, no debo dar ninguna pista acerca de donde sucedieron en realidad los hechos narrados. Puedo decir, eso sí, que Donde duermen las aguas es una novela que se estuvo gestando durante tres años, hasta que llegó el momento mágico en que las palabras se fueron deslizando sobre el papel, sin ningún esfuerzo. Y en tan solo treinta días, la novela estuvo acabada. Eso sí, fueron treinta días casi sin dormir, ni comer, ni salir, ni nada, salvo escribir. Biescas de Obago NO EXISTE. Es un pueblo imaginario en el que se sintetizan las virtudes y defectos de los pueblos pirenaicos. Así pues, no tratéis de situarlo en el mapa, ni de deducir, por las pistas que doy, qué pueblo es en realidad. Al principio de la novela, la protagonista está buscando Biescas de Obago en un mapa, sin encontrarlo, por supuesto. Es un pequeño guiño a los lectores que han tratado de localizarlo infructuosamente, tras La escarcha sobre los hombros. También es un homenaje a los maestros y maestras que nos enseñaron a leer, a escribir, a vivir. Y un regalo para mis lectores, que me pedían otra novela ambientada en el Pirineo. Está publicada por Onagro Ediciones (antes Zócalo Editorial), a pesar deque podría haber sido aceptada por una gran editorial nacional. Pero yo tenía una deuda de gratitud con el editor, Fernández Jiménez Ocaña, pues él me había publicado La escarcha sobre los hombros cuando todos la rechazaban. Además de habernos hecho amigos tras ocho años de ferias del libro juntos. La primera edición se realizó en mayo de 2006, y ha sido muy bien acogida por el público: en la feria del libro de Zaragoza firmé más de 500 ejemplares de Donde duermen las aguas. |